AMAZONIA, EN NÚMEROS
La selva amazónica alberga la biodiversidad más rica de todos los ecosistemas del planeta.
El sistema fluvial de la Amazonia también suministra energía hidroeléctrica a millones de personas.
La región es el hogar de una población tan numerosa como la de Tokio, Ciudad de México y Nueva York juntas.
Los bosques de la Amazonia, la vasta cuenca del río Amazonas y el Escudo Guayanés en América del Sur, están desapareciendo rápidamente. En 2015 se perdieron cerca de 6.000 kilómetros cuadrados (3.600 millas cuadradas) de bosques solo en la Amazonia brasileña. Si esto continúa, la humanidad enfrenta la pérdida irrevocable de uno de los grandes alberges de biodiversidad, agua dulce y resiliencia climática: los bosques por sí solos proporcionan el 30 por ciento de la solución al cambio climático.
Los próximos cinco años son de vital importancia para la Amazonia. El aumento de la demanda mundial de recursos amenaza una mayor deforestación que pone en riesgo la región, a sus habitantes y al mundo. Con esto en mente, Conservación Internacional y sus socios están abordando una estrategia ambiciosa para conservar la naturaleza en la Amazonía para asegurar los beneficios que nos proporciona.
El reto
La expansión agrícola insostenible, la construcción de carreteras y las industrias extractivas están destruyendo innecesariamente los bosques de la Amazonia y los servicios que brindan (como el control de inundaciones y el almacenamiento de carbono). Las actividades humanas ya han eliminado el 10 por ciento de la selva amazónica, un área que duplica el tamaño de Texas.
La meta
La meta de Conservación Internacional: lograr una deforestación neta cero en la Amazonía para proteger los recursos esenciales, mitigar el cambio climático y aumentar la prosperidad de las personas.
Nuestra estrategia
En este mapa, la Amazonia se divide en tres “zonas”: verde, amarilla y roja.
- Zona Verde: Aproximadamente el 45% de la Amazonia se compone de bosques formalmente designados como áreas protegidas o tierras y territorios indígenas.
- Zona Amarilla: Se estima que el 46% de la Amazonia que es principalmente bosque, su uso (o protección) aún no se ha definido formalmente.
- Zona Roja: El 9% restante de la Amazonía ya se ha convertido a la agricultura, se ha transformado en ciudades o se ha degradado para satisfacer la demanda de alimentos, hogares, energía y empleos.
NUESTRAS SOLUCIONES
1. Fortalecer y expandir la Zona Verde
Aproximadamente el 44% de la Amazonia se encuentra dentro de la “Zona Verde,” donde Conservación Internacional ayudará a consolidar y fortalecer la gestión de las áreas protegidas existentes y las tierras y territorios indígenas. Incluso en estas áreas protegidas, hasta la fecha el 3% de sus bosques ya han sido deforestados. Conservación Internacional enfatizará el potencial de generación de ingresos de las áreas protegidas (como el ecoturismo y los fondos fiduciarios), y promoverá el desarrollo sostenible, la distribución de beneficios y la resolución de conflictos para una conservación duradera.
2. Evitar la deforestación en la Zona Amarilla
La zona de mayor riesgo, la "Zona Amarilla," es la primera línea para cambiar el rumbo de la destrucción, ya que abarca grandes áreas de bosque relativamente intacto que aún han sido designadas para su protección, o para la producción. El enfoque de Conservación Internacional incluye asesorar sobre el establecimiento de nuevas áreas protegidas y tierras y territorios indígenas; ampliar los programas que alientan a las personas a proteger sus bosques brindándoles beneficios económicos; aumentar el acceso al financiamiento climático para la deforestación cero; y promover la adopción de la contabilidad del capital natural como marco para el desarrollo sostenible a largo plazo.
3. Incrementar la producción sostenible en la Zona Roja
En la "Zona Roja," donde los bosques de la Amazonia ya se han perdido o están muy degradados, Conservación Internacional promoverá la agricultura sostenible y la planificación inteligente del desarrollo para reducir la pobreza y minimizar el impacto de la infraestructura y la extracción de minerales, dos de los principales impulsores de la deforestación en estas áreas más densamente pobladas. Desde asegurar compromisos del sector privado sobre cadenas de suministro libres de deforestación hasta integrar la gestión de la biodiversidad y los ecosistemas en la infraestructura y el desarrollo extractivo, Conservación Internacional tiene como objetivo evitar una mayor pérdida de bosques.
Pueblos indígenas y comunidades locales
Our Future Forests/Nuestros Futuros Bosques – Amazonia Verde está trabajando para conservar hasta el 12 por ciento de la Amazonia — alrededor de 73 millones de hectáreas (180 millones de acres) — para el 2025. Con el apoyo del gobierno de Francia, el proyecto es una de las prioridades de conservación de la Alianza para la Protección de los Bosques Tropicales, una iniciativa para la protección, restauración y manejo sostenible de los bosques tropicales.