50 niños y niñas shuar apuestan por cuidar a las especies y a las reservas vitales de la Amazonía

junio 5, 2025

En la comunidad shuar de Chuwitayo, en Pastaza, 50 niñas y niños formaron un círculo en el patio de su escuela para participar en el taller “Descubre especies y reservas vitales”. Rodeados de árboles y aulas esperaban con entusiasmo el inicio de una jornada diferente.  Pero traían algo más que cuadernos: una curiosidad infinita que no dejaba espacio para el silencio. ¿Qué vamos a hacer?”, preguntaban. “¿Cuáles son esos animales?”, insistían, tocando con asombro las figuras impresas del jaguar, del mono lanudo, la rana arbórea ninfa, entre otras.

Chuwitayo es una comunidad ubicada en una de las rutas priorizadas dentro del corredor de conectividad Palora–Pastaza. Gracias a los remanentes de bosque que conserva, permite la conexión entre zonas núcleo como los bosques protectores Arutam y Kutukú Shaimi. La escuela donde se realizó el taller se encuentra justo en un punto crítico del corredor, donde el bosque empieza a fragmentarse, la carretera presenta un obstáculo para la movilidad de los animales, por lo que la conservación de estos remanentes resulta esencial.

El objetivo del taller fue profundizar en los niños la comprensión de la importancia de proteger a los animales y su hábitat natural, destacando el papel de los corredores de conectividad como caminos de vida. Se compartieron datos sobre diez especies focales y cómo protegerlas. Además, se habló sobre las reservas vitales, sitios esenciales para la vida, por su riqueza ecológica, cultural y social.

El taller tuvo un enfoque lúdico, a través de la pintura, la escultura y la literatura, los niños aprendieron conceptos científicos de manera creativa.  Armaron un rompecabezas que les permitió visualizar el corredor de conectividad Palora–Pastaza y entender qué significa una reserva vital. También construyeron figuras tridimensionales de animales, aprendiendo datos biológicos y aspectos culturales de cada especie. A través de la narración de una historia, reflexionaron sobre el rol que cumplen estos animales en la conservación y en la conexión entre fragmentos de bosque y finalmente pintaron máscaras de las especies focales del corredor.

Una educación ambiental desde temprana edad les permite a las niñas y niños tomar decisiones informadas. Además, fomenta el sentido de responsabilidad compartida para proteger los territorios y las especies con las que conviven.


Esta actividad se desarrolló en el marco de los proyectos:

  • “Corredores de Conectividad Amazónicos”, un proyecto del MAATE, co-ejecutada por CI-Ecuador, con el apoyo del Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF, por sus siglas en inglés) y financiada por el Fondo para el Medio Ambiente Mundial (GEF, por sus siglas en inglés).
  • “Reservas Vitales”, un proyecto implementado por el Fondo Francés para el Medio Ambiente Mundial (FFEM) y Conservación Internacional Ecuador

Fotos: PR Estudio y Liz Jurado

Diseño, ilustraciones: Inpar Estudio